¿Cómo cuidar las juntas de las ventanas?
A pesar de su durabilidad y calidad, el sello puede perder sus propiedades tras un largo periodo de uso. Esto puede deberse a varias razones: instalación incorrecta, desgaste excesivo de las piezas, manipulación de productos químicos agresivos, etc. Por lo tanto, todas las juntas deben ser revisadas regularmente. Una junta desgastada puede permitir el paso de aire frío y viento, lo que aumenta el costo de la calefacción. Si un elemento ya no cumple con las expectativas, debe ser cambiado por uno nuevo.
¿De qué están hechos las juntas Steigner?
Las juntas con los perfiles D, E, P y V están fabricadas con EPDM (terpolímero etileno-propileno-dieno). Su composición química y su construcción hacen que los elementos sean extremadamente duraderos (aproximadamente 8 años de durabilidad), resistentes a la radiación UV, al ozono y a las condiciones climáticas. Las juntas conservan su elasticidad incluso en caso de heladas prolongadas y calor sin ningún daño.
Las juntas SFD y STD se hicieron de TPE (elastómero termoplástico), es decir, una mezcla de materiales duros termoplásticos con caucho. TPE es flexible, resistente al desgaste y al envejecimiento. El material es ambientalmente seguro.
La silicona utilizada en la producción de juntas de perfil Omega se distingue por su resistencia a la intemperie, memoria de forma e impermeabilidad. La silicona es un material totalmente atóxico.
¿Por qué elegir las juntas Steigner?
El aislamiento del edificio basado en las juntas de ventanas y puertas Steigner reduce los costes de calefacción hasta un 35-40% al año. Las juntas se adhieren perfectamente al sustrato y no dejan que penetre aire frío o humedad. Se encajan en aperturas de diferentes anchuras, asegurando un sellado duradero y eficaz.